EL CLIMA YA NO ES UNA EXCUSA PARA RETOMAR EL DEPORTE

EL CLIMA YA NO ES UNA EXCUSA PARA RETOMAR EL DEPORTE
El invierno quedó atrás, y con la llegada de la primavera tenemos la oportunidad de vestir ropa más ligera, usar más las zapatillas, cambiar el café o el té por agua fresca y retomar la actividad física que, a veces, postergamos durante los meses de frío. Para ello, te compartimos los siguientes consejos que nos entregó Paulo Castro, profesor de Deportes UC, y Estefany Hermosilla, personal trainner e integrante de la Federación de Fisiculturistas de Chile.
03-10-2019
Por Allison Soto (estudiante de Formación Pedagógica)

1. Ten objetivos claros:
Para lograr resultados, debes tener claro qué deseas alcanzar: bajar algunos kilos de más, fortalecer musculatura, mejorar tu capacidad cardiovascular o prepararte para alguna competencia en particular. De eso dependerá la disciplina o ejercicios que deberás hacer, y su regularidad. Plantéate metas de tiempo semanal que dedicarás a la actividad física y planifica una rutina de ejercicios. Pero recuerda que esto es un trabajo constante y debes comenzar de menos a más, no te sobreexijas de inmediato. Lo más importante es la motivación y constancia.

2. Cuida tu salud: Si no eres asiduo(a) a practicar deporte, primero debes hacerte un chequeo médico para estar seguro(a) de qué necesita tu cuerpo y de que la actividad que deseas no te cause inconvenientes. Si solías realizar actividad física, retoma lo antes posible ty rutina, para que tu cuerpo utilice su memoria muscular y resulte fácil volver a tu ritmo deportivo.

3. Haz lo que te gusta: A veces seguir rutinas que incluyen máquinas o trabajo en lugares cerrados no encaja con tu necesidad de estar al aire libre, por lo cual lo óptimo es escoger una actividad en espacios abiertos, como andar en bicicleta, salir a trotar o participar en sesiones de alguna disciplina al aire libre. En cambio, si practicar deporte en el exterior te produce complicaciones (alergia estacional, por ejemplo), es mejor planificar tu rutina en un gimnasio, tu casa u otro lugar cerrado.

4. Cuida tu alimentación: Para obtener el 100 % de los resultados esperados, más de la mitad dependerá de tus hábitos alimenticios. La alimentación requerida varía según la persona, su estado de salud, edad y objetivos. Por ejemplo, si deseas perder peso, debes consumir menos calorías de las que gastas a diario y tomar mucho agua. Pero si quieres aumentar masa muscular, la ingesta calórica debe ser mayor al gasto diario, acompañado de ejercicio.

5. Hidrátate bien: Más de un 60% del organismo está compuesto por agua, elemento que se pierde a través del sudor al practicar actividad física. Por ejemplo, luego de un partido de básquetbol o tenis, perdemos entre 1,5 y 1,8 litros de agua. Por ello, es muy importante beber agua antes, durante y después de la actividad física. También hay que considerar que las necesidades hídricas pueden variar de acuerdo a si la persona es hombre o mujer, su edad, intensidad y duración de la actividad que realiza, y condiciones ambientales.

6. Cambia tus rutinas: Si deseas avances notorios, combina la práctica deportiva con cambios en tu rutina diaria. Por ejemplo, reemplaza los ascensores y escaleras mecánicas por escaleras tradicionales; camina al menos 30 minutos diarios y, si es posible, realiza pequeños trayectos a pie, y prefiere el uso de bicicleta para movilizarte en tramos cortos.