Ángela Tironi está feliz. La alumna de segundo año del programa de Doctorado en Lingüística UC se hizo con la categoría de Mención Honrosa del público en el pasado concurso de cuentos breves “Palabras confinadas: Relatos de una pandemia”. La Comunidad UC, con un 63% del total de las preferencias, votó para que su relato titulado “Username: Jasmin87” ganara dicha mención.

El cuento tiene como protagonista a una mujer migrante que arriba a Chile justo en el momento en que estalla la pandemia, enfrentándose al confinamiento, la pobreza y la desilusión de la ruptura de sus planes en el territorio. Gracias a la ayuda de la tecnología, logra entablar un vínculo en línea que la ayuda a escapar de su realidad.

Para la autora, recibir este reconocimiento por parte de la comunidad y de sus propios compañeros y compañeras es un honor y un halago.

“Le tenía harta fe a ese cuento, fue escrito con harto cariño y creo que la gente logró identificarse con alguno de los personajes y comprendió la problemática social de la migración en Santiago y la brutalidad de la pobreza durante la pandemia”, aseguró la estudiante, quien agregó que no parará de escribir. “No he parado desde que mandé el primer cuento. No quiero parar, quiero seguir contando historias, contando lo que la gente sueña, teme, las frustraciones y las alegrías”.

Sin duda el talento y creatividad de Ángela han rendido frutos, a pesar de que asegura que recién este año comenzó a escribir cuentos. Pero el premio recibido en el concurso organizado por la DAE no ha sido el único.

En marzo de este año, obtuvo el primer lugar del concurso “¿Quién te motiva? Escritos de mujeres”, organizado por la municipalidad de San Joaquín. Ahí, se topó con Pía Barros, destacada escritora chilena perteneciente a la generación de los 80’s quien formó parte del jurado de aquel concurso. Según explica Tironi, ella la ayudó a hacer alcances importantes sobre su escritura.

“Mi cuento era el único que realmente era un cuento, los demás eran relatos (…). El relato no es ficción y estás contando la historia de alguien, o la tuya. En mi caso no, era solamente un personaje ficticio. Evidentemente detrás de cada personaje que tu construyes hay voces de personas reales que confluyen en la delineación del personaje”, explicó.

Para la autora, el que existan estos espacios de creación en la universidad es sumamente importante y valioso, especialmente para poder tener un espacio distinto al habitual en el que se desarrolla.

“A veces una necesita espacios de fuga y creación que no estén siempre relacionados al tema que una está mirando todo el tiempo”, explicó sobre los espacios que se dan a las comunidades para crear.

Finalmente, la futura doctora hace un llamado a las comunidades a participar de estas instancias y a que se atrevan a contar las grandes historias que tiene cada ser humano, invitando a que todos y todas se motiven a escribir y expresarse. “Hay mucho que contar, hemos tenido años super difíciles y espero que no hayan sido en vano”, finalizó Tironi.