Estudiar y analizar la experiencia de estudiantes que migraron desde otras regiones hasta las ciudades en donde se encuentran sus respectivas universidades. Ese fue el foco de la investigación realizada por distintos profesionales de la UC, y que salió recientemente publicada en el artículo “Transición a la Universidad de Estudiantes Migrantes Internos en Chile: Experiencias en un Escenario de Triple Ruptura”. En la investigación, uno de los que se hizo presente fue el coordinador del Observatorio de las Juventudes Universitarias de la DAE, Gonzalo Gallardo, quien puso su conocimiento a dispoción para generar la publicación, en conjunto con otros profesionales de la UC.

Con el objetivo principal de comprender el proceso de transición del colegio a la universidad, sumado a los ajustes de vivir en un nuevo lugar que está rodeados tanto de aprendizajes como obstáculos, el Observatorio de la Juventud y el Núcleo Milenio en Educación Superior intervalidaron dos estudios (uno del año 2012-2013 y otro del 2019) para generar la publicación.

Para iniciar, se entrevistaron estudiantes de distintas localidades de nuestro país, también conocidos comúnmente como “estudiantes de regiones''. Luego, los estudios se recategorizaron y revisaron por pares de forma anónima para así perfeccionar este artículo.

Sumado a esto, los datos obtenidos en el año 2011 indican que los(as) estudiantes que debían abandonar su ciudad de origen para llegar a estudiar a Santiago atravesaban una situación mucho más compleja que aquellos que estudiaban desde la misma capital en la UC.

“Nos pareció relevante ir directamente a los estudiantes y preguntarles sobre cuáles eran sus vivencias, qué era lo que les dificultaba este proceso, qué había favorecido esta transición, entre muchas cosas más”, señaló Gallardo.

Si bien este trabajo está dirigido a la comunidad científica, sus autores, al igual que Education Policy Analysis Archives, revista de la Universidad de Arizona en donde fue publicado, esperan que esto sea un documento que permita ayudar a las políticas educativas a nivel institucional. Asimismo, existe el deseo de que sirva para la reflexión de los profesionales de Asuntos Estudiantiles y, porque no, en el actuar de los profesores.

“Que ellos puedan ser más sensibles a las vivencias de los y las estudiantes que llegan de distintas regiones y, así poder generar un acompañamiento o una bienvenida más acogedora”, mencionó Gallardo. Además, el profesional agregó que “hay distintas acciones que pueden realizar los docentes para hacer una experiencia más grata de transición a la universidad”.

Finalmente, la importancia de difundir este artículo es que no hay mucha evidencia respecto a este tema y es un punto sobre el cual se debe seguir investigando, pero, por ahora, es fundamental sensibilizar a la comunidad universitaria para que, en función de la empatía y la inclusión, se apoye a los y las estudiantes que provienen de otras regiones.

“Es muy importante que ellos sepan que lo que les pasa, en el sentido de sentirse solos y vivir esta doble ruptura, de vivir en una nueva ciudad, dejar tu casa, acostumbrarte a vivir con personas distintas a las que acostumbras y pasar del colegio a la universidad es desafiante. Que extrañar la casa es normal, pues se está viviendo un proceso complejo” añadió el profesor y estudiante de doctorado en Ciencias Sociales.

Si quieres conocer la experiencia de compañeros y compañeras de la UC que han tenido que emigrar para estudiar, te dejamos el artículo aquí.