Por Sebastián Valenzuela (estudiante de Periodismo)

Está en primer año de College en Artes y Humanidades, pero Nice López lleva buena parte de su vida desarrollando su faceta artística y pasión por la música. Todo comenzó cuando esta joven ingresó a los 11 años a la banda de guerra en una escuela de música, donde por un año completo se dedicó a aprender y dominar el pífano, instrumento musical de viento, similar a una flauta.

Teniendo la inquietud de conocer otros instrumentos, Nice decidió cambiarse de grupo e integró una banda de concierto, donde el repertorio musical era más amplio. “Ahí conocí el saxofón y aunque pasé por más instrumentos, me quedé con éste y ya llevo siete años tocándolo”, cuenta la novata de College. Tras descubrir el talento que poseía con el saxofón, su profesor la instó a llegar más lejos y la recomendó para ingresar a la Conchalí Big Band, una orquesta juvenil de jazz con 25 años de trayectoria. Ingresar a esta banda trajo diversos desafíos para Nice López. Por temas de tiempo, debió cambiarse de colegio en segundo medio, para así poder calzar con los horarios de ensayos. Además, tuvo que trabajar muy duro para nivelarse, pues la mayoría de los miembros de la banda tenían más conocimientos y experiencia en jazz que ella. “Tuve que empezar desde cero, un nuevo colegio, una nueva banda, nuevos compañeros y aprender un nuevo lenguaje del saxofón en el jazz. Fueron horas y horas de estudio, sacrificando juntas familiares y fechas importantes”, confiesa Nice. Añade que su proceso de nivelación duró un año, para estar a la par con sus compañeros de la banda.

Con la Conchalí Big Band, Nice tuvo la oportunidad de participar en giras por distintas regiones del país, pero el desafío fue mayor cuando en junio de 2018 el grupo fue invitado a tocar en un festival de bandas en Alemania. “Fue una experiencia inolvidable, el viaje de mi vida”, destaca Nice, quien durante su estancia en el país europeo tuvo la oportunidad de compartir con músicos de todo el mundo y de todos los estilos musicales.

Ahora un nuevo desafío se aproxima para Nice y la Conchalí Big Band. En enero del próximo año viajarán a Cuba participarán en el Festival de Jazz La Plaza, en La Habana. Para ello, la joven artista y sus compañeros se encuentran ensayando arduamente y preparando un repertorio de distintas composiciones nacionales, además de planificar una serie de conciertos y otras actividades que les ayude a financiar el viaje a Cuba.

Para Nice todo este viaje a través de los años en la música le cambió la vida, admite que estar en esta orquesta de jazz la hace muy feliz y, ahora estando en la universidad, tocar el saxofón le ha servido también como una forma de relajarse. Además, Nice y un amigo conforman una banda de reggae, donde ha explorado otras aristas de la música, como la composición y el canto.

A pesar de su amor por el jazz, Nice sigue en una constante búsqueda por encontrar otras facetas artísticas y es por eso que entró a estudiar College en Artes y Humanidades, donde ha podido conocer y aprender otras expresiones artísticas que le interesan, como el teatro. A sus 19 años Nice no sabe con exactitud qué le depara el futuro respecto a la música, pero sí está segura de que quiere dedicar su vida al arte, en sus distintas expresiones, y sueña con recorrer el mundo y conocer otras personas y culturas. “Quiero viajar, crecer musicalmente, tener una banda y encontrar mis otras facetas artísticas aquí en la universidad, para poder formarme como artista y lograr mi máximo potencial”.