Con 14 años de trayectoria, Jóvenes sin Fronteras es uno de los voluntariados de acción social más antiguos de la UC. Cada año se destacan jugándosela por llegar a los sectores más aislados de nuestro país, para contribuir a mejorar la calidad de vida personas que habitan en distintos sectores de Chile.

En este contexto, el equipo actual de Jóvenes sin Fronteras decidió este año llevar a cabo un proceso de reflexión y restructuración interna, que busca actualizar sus objetivos como voluntariado, innovar en su labor y, en definitiva, mejorar su trabajo de cara a las comunidades que benefician. Debido a este proceso de cambios, Jóvenes sin Fronteras se restó, por primera vez en su historia, de participar en los Trabajos Voluntarios de Invierno 2019. "Consideramos de suma relevancia difundir y transparentar estos cambios, ya que, desde la creación del proyecto (2005), no se había realizado un proceso de reestructuración de esta envergadura. Con este propósito, por primera vez en toda la historia del proyecto, se cancelaron nuestros trabajos de invierno 2019, para así enfocarnos completamente en la reformulación de nuestro voluntariado y en la planificación de los próximos trabajos de verano 2020, para los cuales pronto se abrirá el proceso de inscripción de voluntarios", explica Rodrigo Alfaro, estudiante de Psicología y uno de los jefes de la comisión Difusión y Eventos de Jóvenes sin Fronteras. 

Así, el voluntariado busca perseguir e implementar los siguientes objetivos y cambios:

1.- Nos enfocaremos principalmente en trabajar en comunidades hasta donde no llegan los recursos del Estado, y no necesariamente en lugares que estén aislados geográficamente. Esto para apoyar la descentralización y ampliar la cobertura de los diferentes servicios que podemos ofrecer como profesionales en formación.

2.- Se redactaron protocolos para las diferentes situaciones que podrían ocurrir durante los trabajos, ya sea entre los voluntarios o alguien de las comunidades que visitamos, por ejemplo, protocolos en caso de producirse situaciones de violencia sexual. También se aclararon las responsabilidades, tanto de jefes como de voluntarios.

3.- Se armó un equipo de capacitación de voluntarios, para desarrollar las diferentes competencias necesarias para el buen cumplimiento de los trabajos por parte de los integrantes del voluntariado. Como el manejo del tiempo, el liderazgo, como llevar a cabo una buena comisión, entre otros.

4.- El número de comunidades donde se trabajará oscilará entre 5 y 7, en donde habrá un grupo de trabajo en cada una, con un total de 10 personas aproximadamente.

5.- No necesariamente realizaremos construcciones, ya que hay comunidades que directamente no las necesitan. Optaremos por distribuir nuestros recursos en distintas labores, para efectuar un impacto más provechoso para la comunidad, como mediante la aplicación de diferentes talleres intensivos.

Deseamos mucho éxito a Jóvenes sin Fronteras en este nuevo período, y esperamos que todos estos cambios resulten provechosos, tanto para la formación integral de sus voluntarios como para el valioso trabajo que realizan en beneficio de comunidades de escasos recursos, a lo largo del país. Recuerda que este proyecto de acción social abrirá muy pronto su inscripción para captar nuevos voluntarios, ¡así que debes mantenerte atento(a)!

Asimismo, les invitamos a postular al fondo DAE Acción Social Verano, que en octubre 2019 abrirá su convocatoria.


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